
La central obrera repudió los decretos que anularon el financiamiento universitario y la emergencia pediátrica, denunció un «ajuste que pone en peligro derechos fundamentales» y llamó a movilizar este miércoles junto a sindicatos, la comunidad educativa con la Marcha Federal y organizaciones sociales.
La Confederación General del Trabajo (CGT) publicó un comunicado en el que expresó su «más enérgico rechazo» a los vetos del presidente Javier Milei a la Ley de Financiamientos Universitario y a la Ley de Emergencia Pediátrica y de Residencias Nacionales, que habían sido aprobadas por el Congreso.
“Tal como lo hizo semanas atrás con la Ley de Emergencia en Discapacidad y las leyes previsionales, el Presidente volvió a recurrir al veto para impedir la puesta en marcha de dos importantes iniciativas que buscan garantizar la protección y el sostenimiento del financiamiento de la educación universitaria pública y del derecho a la salud en niñas, niños y adolescentes”, remarcó la central.
En el texto, la CGT sostuvo que “la salud y la educación pública son pilares fundamentales para el progreso y desarrollo del país” y advirtió que “el fuerte ajuste desplegado por el Gobierno nacional no hace más que poner en grave peligro su funcionamiento y afecta directamente en las condiciones laborales de las y los trabajadores, como así también en el acceso de la ciudadanía a derechos fundamentales”.
La central obrera enmarcó la decisión del Ejecutivo en “el ajuste aplicado sobre los sectores más vulnerables” y denunció que, desde la asunción de Milei, el presupuesto destinado a universidades, educación y salud pública “registra una pérdida real cercana al 40%”.
“Ambas leyes vetadas son producto del consenso alcanzado entre amplios sectores de nuestra sociedad, por eso instamos a las diputadas y diputados a que insistan con la validez de las mismas”, reclamó la conducción sindical.
Finalmente, la CGT convocó a movilizar este miércoles 17 de septiembre a las 15 horas frente al Congreso, donde acompañará a organizaciones de la salud, la comunidad universitaria, sindicatos, movimientos sociales y fuerzas políticas “en el reclamo colectivo a favor de la salud y la educación pública”.