
En el marco de la investigación por el disparo que hirió al fotógrafo Pablo Grillo durante una manifestación el pasado 12 de marzo, la jueza María Servini ordenó una reconstrucción del hecho para el próximo lunes. La medida estará a cargo de la División Balística de la Policía de la Ciudad y busca determinar la trayectoria, velocidad y ángulo del proyectil, así como la posición del gendarme Héctor Guerrero -único imputado- y de Grillo al momento del impacto.
La pericia es clave para esclarecer cómo se efectuó el disparo y si se cumplió con los protocolos establecidos para el uso de armas menos letales. La hipótesis preliminar indica que el arma habría sido disparada a la altura de la cabeza, lo cual sería una grave irregularidad.
Durante la inspección preparatoria, realizada el 2 de agosto, participaron peritos oficiales, técnicos de las partes, representantes del CELS, la LADH y personal judicial, quienes realizaron mediciones, tomas fotográficas y planimetría del lugar.
La reconstrucción servirá como prueba fundamental antes de la declaración indagatoria del gendarme Guerrero, prevista para el 2 de septiembre.