Con el objetivo de modernizar y agilizar los trámites, el Gobierno nacional puso en marcha el nuevo sistema de Licencia Nacional de Conducir Digital, una credencial que ya está disponible en 22 de las 24 jurisdicciones del país y que tiene la misma validez legal que el documento físico. Sin embargo, la implementación todavía no es completa: las provincias de Buenos Aires y Formosa aún no adhirieron al sistema y continúan con la modalidad presencial tradicional.
El nuevo formato digital puede visualizarse desde la aplicación oficial Mi Argentina y presenta un diseño vertical con un código QR dinámico que se actualiza cada 24 horas. Esto permite que los agentes de tránsito puedan verificar su autenticidad incluso sin conexión a internet. Además, se puede acceder al documento en cualquier momento desde el celular, lo que lo convierte en una opción práctica para conductores de todo el país.
A pesar del avance, la versión física sigue siendo válida y no es obligatoria su digitalización. La licencia impresa se puede seguir solicitando en los centros habilitados, aunque también es posible renovar o ampliar el registro completamente de forma online a través de la plataforma del organismo.
El trámite digital contempla el pago del Certificado Nacional de Antecedentes de Tránsito (CENAT), la realización del examen psicofísico en centros autorizados y la posterior validación a través de la cuenta de Mi Argentina. Una vez cumplidos estos pasos, el documento aparece cargado automáticamente en la app.
En el caso de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el sistema solo está habilitado para licencias profesionales, mientras que las categorías particulares aún deben realizar el trámite por la vía tradicional. Esta decisión, según fuentes oficiales, responde a una etapa progresiva de adaptación y control.
Entre las provincias que ya utilizan el nuevo formato se encuentran Córdoba, Santa Fe, La Rioja, Mendoza, Jujuy, Tucumán, Neuquén, Chubut, San Juan y Entre Ríos, entre otras. Se estima que en las próximas semanas más distritos podrían sumarse al sistema, que busca simplificar la gestión del documento más requerido por los conductores argentinos.
Mientras tanto, la licencia digital avanza como una herramienta clave de modernización, pero su implementación completa todavía depende de decisiones locales que deberán alinearse con esta nueva política de Estado.