El gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, anunció la puesta en marcha de controles antidoping obligatorios y sorpresivos para integrantes de las fuerzas de seguridad provinciales, incluyendo policías, penitenciarios y autoridades políticas. El mandatario se sometió como prueba públicamente al primer test, que dio negativo.
La medida, diseñada por Pullaro en 2017 cuando encabezaba el Ministerio de Seguridad, busca garantizar transparencia e integridad en instituciones encargadas de proteger a la sociedad. Las pruebas arrojan los resultados de inmediato y miden los niveles de sustancias como la cocaína, marihuana, benzodiazepinas, opioides, metanfetaminas y anfetaminas en sangre los cuales estarán a cargo de laboratorios externos mediante convenio con la Fundación Argentina de Toxicología.
El ministro de Seguridad, Pablo Cococcioni, remarcó que la participación en los controles es inmediata y obligatoria, y que las ausencias injustificadas serán sancionadas. Los tests también formarán parte de los requisitos de ingreso y ascenso dentro de las fuerzas.
“Queremos a los mejores al servicio del pueblo, y eso también implica estar libres de consumo de sustancias ilegales”, afirmó Pullaro.