
El Senado aprobó este jueves y envió a la Cámara de Diputados un proyecto de ley que busca modificar la Ley 26.122, con el objetivo de limitar el alcance y los efectos de los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU). La iniciativa impediría que el presidente pueda legislar por encima del Congreso mediante este tipo de normas, que se emiten únicamente con la firma presidencial.
El Senado de la Nación dio media sanción al proyecto de la oposición que reforma la Ley 26.122, modificando el régimen de los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU), la delegación legislativa y la promulgación parcial de leyes.
La iniciativa fue aprobada con 56 votos a favor, 8 en contra y 2 abstenciones, mientras que algunos artículos específicos recibieron leves variaciones en la votación. Seis senadores estuvieron ausentes durante la sesión. El proyecto ahora fue girado a la Cámara de Diputados para su tratamiento.
La reforma establece que los DNU deben ser ratificados por ambas cámaras del Congreso dentro de un plazo máximo de 90 días, invirtiendo la lógica de la ley vigente desde 2006, que permitía que los decretos quedaran vigentes si el Congreso no se pronunciaba (“sanción ficta”). Además, cada decreto deberá referirse a una sola materia y el Congreso podrá tratar los DNU incluso durante los recesos parlamentarios, según el nuevo artículo 21 bis. La medida no genera erogaciones, pero tiene un fuerte impacto institucional al limitar la capacidad del Ejecutivo de legislar por decreto sin control legislativo.
El proyecto, impulsado por distintos bloques de la oposición —UP, parte de la UCR, PRO y legisladores provinciales—, busca establecer un criterio más restrictivo sobre los DNU y las facultades delegadas del Poder Ejecutivo. La aprobación de esta reforma se sumó a otra derrota del oficialismo en la Cámara alta, que más temprano había dejado firme la Ley de Emergencia en Discapacidad mediante el rechazo definitivo al veto presidencial.