Los trabajadores del hospital leyeron una carta en pública en la que aseguraron que las condiciones laborales «no han mejorado» y las renuncias continúan. «Este modelo no puede desmoronarse por indiferencia o desidia», afirmaron.
Los trabajadores del Hospital Garrahan leyeron este martes una carta pública en la que renovaron su reclamo por la situación presupuestaria, advirtieron que las condiciones laborales «no han mejorado» y exigieron «una respuesta concreta» por parte del Ministerio de Salud.
«Desde la última conferencia del 13 de junio pasado hasta hoy, hubo 14 renuncias más. Implican grupos de trabajo interdisciplinario que se desarman», afirmó la jefa de Clínica de Emergencias, Ana Fustiñana. En total, los trabajadores contabilizan 210 renuncias en lo que va del año.
En una carta abierta a la sociedad leída por el jefe del Servicio de Oncología, Pedro Zubizarreta, señalaron que «la situación no ha mejorado, las renuncias continúan. Pese a cada esfuerzo realizado, a cada intento de diálogo, seguimos esperando una respuesta concreta, una propuesta seria, un gesto de respeto», aseguraron.
El acto se realizó luego de que fracasara la tercera audiencia de recomposición salarial, que debía realizarse este lunes. «Lamentablemente, una vez más, no se hicieron presentes ni las autoridades del hospital ni las del Ministerio de Salud. El conflicto con los residentes tampoco está resuelto. Nos preguntamos, entonces, cuáles son nuestros canales de diálogo, cuál es la forma en que debemos tratar este conflicto», cuestionaron.
Los trabajadores afirmaron que su intención no es que se «naturalice» el conflicto. «No queremos que la sociedad ni las autoridades se acostumbren a vernos de paro, ni tampoco que piensen que bajamos los brazos. No nos queremos rendir porque estamos defendiendo algo mucho más grande que un salario», remarcaron.
«Estamos defendiendo un modelo sanitario que ha salvado miles de vidas y ha acompañado con profesionalismo, dignidad y humanidad a quienes transitan enfermedades muy graves y complejas. Ese modelo no puede desmoronarse por indiferencia o desidia», subrayaron.