
Luego de la contundente derrota contundente a manos del peronismo en las elecciones legislativas de la provincia de Buenos Aires, el presidente decide convocar a “una mesa de diálogo federal con los gobernadores” para recomponer el dialogo entre Nación y las provincias. Hay escepticismo entre los mandatarios.
El presidente Javier Milei resolvió convocar a una mesa de diálogo federal con los gobernadores, en un intento por recomponer vínculos políticos tras la derrota electoral sufrida en la provincia de Buenos Aires. La decisión se conoció este lunes luego de una reunión de gabinete en Casa Rosada, donde también se anunció la creación de una mesa política nacional integrada por su círculo más cercano.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, detalló que la mesa política estará conformada por Karina Milei, Guillermo Francos, Patricia Bullrich, Santiago Caputo, Martín Menem y él mismo, bajo la presidencia del jefe de Estado. En paralelo, el mandatario instruyó al jefe de Gabinete a iniciar la convocatoria a los mandatarios provinciales para abrir un canal de diálogo institucional.
El anuncio, sin embargo, fue recibido con escepticismo. El gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, advirtió en sus redes que “la gente viene hablando fuerte y claro” mientras “el gobierno sigue sin escuchar, paralizado”. Por su parte, el salteño Gustavo Sáenz fue más duro al denunciar que Nación “rompió los acuerdos”: “A mí me cagaron con las obras y me cagaron en lo electoral”, afirmó, comparando al equipo presidencial con “palomas de iglesia” que “cagan a sus fieles”.
La convocatoria, presentada como una autocrítica en el oficialismo, llega en medio de un clima de tensión política y de cara a las elecciones generales de octubre, con gobernadores cada vez más distantes del proyecto libertario.