En medio de un clima político cada vez más condicionado por las urgencias económicas del Gobierno nacional, el senador libertario Francisco Paoltroni volvió a escena con un paquete de proyectos que promete agitar el cierre del año legislativo.
El senador formoseño Francisco Paoltroni anunció que el oficialismo buscará tratar en sesiones extraordinarias tres iniciativas clave para el esquema político del presidente Javier Milei: el Presupuesto 2026, la modernización laboral y la derogación de la Ley de Glaciares, norma que el legislador describió como “nefasta” y responsable de frenar el desarrollo minero.
Aunque el calendario político y económico luce ajustado, Paoltroni se mostró optimista y aseguró que, de aprobarse este paquete de leyes, el riesgo país podría caer a 400 o incluso 300 puntos para enero. Con ese pronóstico, afirmó, la Argentina recuperaría acceso al crédito y se abrirían nuevas posibilidades de financiación “para las provincias, las pymes y las familias”.
El entusiasmo del senador contrasta con las advertencias de economistas y analistas que señalan que los factores que explican el riesgo país exceden ampliamente la aprobación legislativa, pero en el oficialismo insisten en que el “sendero correcto” depende de consolidas estas reformas estructurales.
Paoltroni, que había sido expulsado del bloque de La Libertad Avanza tras negarse a acompañar el pliego de Ariel Lijo para la Corte Suprema, confirmó que regresó a las filas oficiales coincidiendo con la llegada de Patricia Bullrich como presidenta del espacio.
“Yo no rompí nunca; me sacaron amarilla por lo del juez Lijo”, sostuvo, aunque su relato contrasta con la tensión pública que entonces atravesaba la bancada oficialista. El senador apuntó incluso a su exjefe de bloque, a quien identificó solo como “el Gordo Dan”, por haberlo echado “por un tuit”. Con la interna oficialmente “superada”, el oficialismo busca recomponerse para sostener una mayoría que ha mostrado fragilidad durante todo el año.
Según pudo saber Noticias Argentinas, Bullrich mantuvo al menos dos reuniones para reorganizar el bloque que asumirá el 10 de diciembre, con la participación de senadores propios y aliados, entre ellos Paoltroni y la cordobesa Carmen Álvarez Rivero.
El legislador libertario también descartó cualquier posibilidad de que LLA negocie con sectores del peronismo una ampliación de la Corte Suprema, en particular la eventual incorporación de Anabel Fernández Sagasti, figura cercana a Cristina Kirchner. Paoltroni fue contundente: dijo que la senadora mendocina “no tiene ni la idoneidad ni la preparación” para integrar el máximo tribunal y desestimó la necesidad de alcanzar acuerdos con el kirchnerismo.
Como suele ocurrir en el discurso del oficialismo, el senador volvió a cargar contra la exvicepresidenta, a quien calificó como una figura “en caída libre” y “condenada”, retomando argumentos judiciales aún en discusión y que el Gobierno utiliza recurrentemente para polarizar.
El paquete legislativo que el Ejecutivo busca impulsar durante diciembre promete tensar nuevamente las relaciones políticas en la Cámara alta, donde el oficialismo no tiene mayoría propia y depende de una delicada red de acuerdos con bloques provinciales y aliados volátiles.
La reforma laboral y la derogación de la Ley de Glaciares, una norma con amplio respaldo de organizaciones ambientales, sectores académicos y comunidades locales, anticipan debates ásperos. El Presupuesto 2026, por su parte, será el primer presupuesto “mileoista” en términos políticos y económicos, por lo que su discusión funcionará como termómetro de la capacidad del Gobierno para sostener consensos más allá del núcleo duro libertario.
Con un Senado dividido, el oficialismo busca reacomodar su interna con la llegada de Bullrich, diciembre no solo será un mes de sesiones extraordinarias, sino también una prueba crítica para la estrategia política del Gobierno nacional y su capacidad real de impulsar su agenda.
