El jury contra la jueza Julieta Makintach, acusada por su presunta participación en la filmación del documental Justicia divina, continúa este miércoles en La Plata con una nueva audiencia que tiene como principales testigos a Dalma y Gianinna Maradona.
Las hijas del “Diez” habían sido convocadas para declarar el martes, pero solicitaron postergar su testimonio. También se presentará José Arnal, socio de la productora La Doble, señalada como responsable del proyecto audiovisual que provocó la suspensión del juicio oral por la muerte de Diego Maradona, en el que Makintach tenía un rol central.
En la audiencia del martes declaró María Lía Alemán, amiga de la magistrada, quien aseguró haber sido el nexo entre Makintach y el guionista Juan “El Chavo” D’Emilio, uno de los impulsores del documental.
«Le dije al Chavo: ‘Con ella tenemos que hacer algo, una mujer con trayectoria en la Justicia, en un ambiente tan machista, que llega hasta este caso’. Al día siguiente, me volvió a preguntar si era posible, y entonces le escribí a Julieta para comentarle», relató Alemán ante el tribunal.
Su testimonio coincidió con parte de la versión de la jueza, quien negó haber tenido participación activa en la producción y defendió su conducta durante el juicio.
«Mis colegas sabían que tenía una amiga que quería hacer un documental sobre la Justicia vinculada al caso Maradona. No es lo mismo que estar involucrada. Es una sutileza, pero esa sutileza me trajo hasta acá», expresó Makintach en su declaración.
Tras declarar, la magistrada dialogó con la prensa y apuntó contra el tratamiento mediático del caso: “No vamos a generar una batalla con la prensa, pero creo que se difundió información distorsionada que generó una bola de nieve alejada de la verdad. Yo no actué en el juicio, el juicio no se filmaba”, sostuvo.
La jueza aseguró además que las imágenes que circularon eran planos breves y sin audio, tomados durante una instancia pública del proceso judicial transmitida por YouTube.
«La cámara era tan grande que era imposible no verla. No hay nada oculto, prohibido ni clandestino. Si está permitido, no está prohibido», argumentó.
Makintach también afirmó que puso su renuncia a disposición del Poder Judicial, aunque insistió en que el proceso en su contra responde a presiones internas y mediáticas.
«Lo único que quiero es que valoren cómo sucedió todo, sin distorsiones ni inflados mediáticos. Hubo testigos presionados para no venir. ¿Le tienen miedo a la verdad? Siempre se dijo que había tres juicios: uno mediático, uno verdadero y uno oculto», concluyó.
El jury, que se desarrolla en la ciudad de La Plata, continuará durante los próximos días con nuevas declaraciones y pruebas. El caso mantiene la atención pública por el cruce entre el poder judicial, la exposición mediática y la figura de Maradona, un cóctel que sigue generando controversia dentro y fuera de los tribunales.
