Conmoción en Neuquén: un jubilado murió en la sede del PAMI mientras esperaba atención

El hecho generó indignación entre afiliados y familiares, que denuncian demoras, maltrato y falta de respuestas en el sistema de atención a adultos mayores.

La mañana del viernes 6 de junio se tiñó de tragedia en la sede del PAMI de la ciudad de Neuquén, cuando un jubilado de 80 años, identificado como Ángel Humberto Ledda, se descompensó mientras esperaba ser atendido y falleció camino al hospital. El episodio fue confirmado por fuentes oficiales del organismo y por medios locales, y provocó una fuerte conmoción social.

Testigos que se encontraban en el lugar relataron que el hombre aguardaba su turno para realizar un trámite relacionado con su cobertura médica cuando comenzó a sentirse mal. Personal del propio PAMI y luego profesionales del Sistema Integrado de Emergencias del Neuquén (SIEN) intentaron reanimarlo durante varios minutos. Pese a los esfuerzos, Ledda murió en la ambulancia mientras era trasladado al Hospital Castro Rendón.

El caso reavivó el debate sobre las condiciones de atención en el sistema de salud para jubilados y pensionados, especialmente en el contexto de ajustes presupuestarios, falta de personal y recortes denunciados por trabajadores del organismo y organizaciones de adultos mayores.

Indignación y reclamos

Tras conocerse el hecho, numerosos usuarios se manifestaron en redes sociales denunciando largas esperas, dificultades para acceder a medicamentos y prestaciones, y un trato deshumanizado hacia los afiliados del PAMI. El fallecimiento del jubilado fue interpretado como una muestra dolorosa de la situación límite que atraviesan muchas personas mayores en el país.

“El sistema no resiste más. Los adultos mayores son sometidos a peregrinaciones para obtener sus remedios o autorizar una orden médica. Y ahora esto…”, expresó una mujer presente en el lugar, visiblemente conmovida.

Un hecho que interpela

El fallecimiento de Ángel Ledda no es un hecho aislado, sino que se enmarca en un contexto más amplio de crisis del sistema de atención a jubilados en Argentina. Con una población envejecida y con necesidades médicas complejas, las falencias del sistema se vuelven cada vez más visibles y urgentes de resolver.

Mientras se aguarda un comunicado oficial por parte del PAMI, familiares y organizaciones sociales exigen explicaciones y una mejora inmediata en las condiciones de atención, para evitar que tragedias como esta se repitan.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *