
La investigación fue llevada adelante por el Ministerio Público Fiscal, con intervención del fiscal de Casos.
Un comerciante jujeño fue condenado a 4 años y 6 meses de prisión por contrabando y lavado de dinero, en el marco de una investigación que terminó con el decomiso de bienes valuados en más de 500 millones de pesos.
Según la información que accedió el Tribuno de Jujuy, la sentencia fue homologada por el juez federal de Garantías N.º 1 de Jujuy, Esteban Hansen, tras un juicio abreviado.
El condenado, identificado como Miguel Ángel Bautista, fue hallado culpable de contrabandear 18 toneladas de hierro de origen peruano, intentar sacar ilegalmente del país un colectivo valuado en 26 millones de pesos y blanquear dinero mediante choferes de una empresa de transporte.
Entre los bienes confiscados se encuentran dos camionetas Toyota Hilux SW4, un colectivo Mercedes Benz, un autoelevador, una motocicleta Honda Tornado 250, celulares, más de 125 millones de pesos, 2.100 dólares, 429 mil pesos bolivianos y mercaderías de distinto origen.
Parte de los productos incautados, especialmente alimentos perecederos, fueron entregados a una asociación civil que trabaja con personas con discapacidad.
La investigación fue llevada adelante por el Ministerio Público Fiscal, con intervención del fiscal de Casos Complejos Federico Zurueta y la auxiliar Valentina Casali, y contó con el apoyo de Gendarmería Nacional y organismos especializados en delitos económicos.
Según explicaron, el caso permitió reconstruir un entramado de operaciones ilegales que Bautista habría desarrollado durante años en La Quiaca, utilizando su empresa de transporte como pantalla.
Uno de los episodios clave ocurrió en noviembre de 2023, cuando Gendarmería detectó un colectivo que circulaba con las luces apagadas cerca del límite con Bolivia. Bautista, que manejaba la unidad, fue detenido a metros del río La Quiaca.
Otro hecho se produjo en mayo de 2024, cuando se incautaron 18 toneladas de hierro transportadas con documentación apócrifa.
Los investigadores también detectaron, en distintos procedimientos de 2022 y 2023, a choferes de su empresa trasladando fajos de billetes por millones de pesos. Los allanamientos posteriores confirmaron el lavado de activos y derivaron en el millonario decomiso.
Con la condena firme, la Justicia consideró probado que el dinero y los bienes secuestrados eran ganancias ilícitas producto del contrabando y el blanqueo, por lo que pasarán a manos del Estado nacional.