A pesar de las advertencias del ministro de Economía, Luis Caputo, las principales automotrices del país aplicaron incrementos en sus listas de precios en junio, reflejando la presión de los costos y la dinámica del mercado.
En junio, las principales automotrices en Argentina decidieron incrementar los precios de sus vehículos, desafiando las advertencias del ministro de Economía, Luis Caputo, quien había instado a las empresas a evitar aumentos para contener la inflación.
Las compañías argumentan que la medida responde a la necesidad de ajustar los valores ante el aumento de costos y la devaluación del peso. A pesar de las reducciones impositivas anunciadas por el gobierno, las automotrices sostienen que otros factores, como la inflación y los costos de producción, continúan presionando al alza los precios.
El sector automotriz ha experimentado una caída en la producción y las ventas durante el primer semestre de 2025, con una disminución del 30% en la producción y del 22% en los patentamientos, según datos de la Asociación de Fábricas de Automotores (ADEFA) . Las automotrices señalan que la falta de insumos importados y la incertidumbre económica han afectado negativamente al sector.
El gobierno había anunciado la eliminación de impuestos internos para vehículos de entre 41 y 75 millones de pesos y la reducción de la alícuota para autos de más de 75 millones, con el objetivo de reducir los precios de venta entre un 15% y un 20% . Sin embargo, las automotrices sostienen que estas medidas no son suficientes para compensar los aumentos en los costos de producción y la inflación.
La decisión de las automotrices de aumentar los precios en junio refleja la complejidad del contexto económico y la dificultad de contener la inflación en un entorno de alta volatilidad y presión de costos.