Renzo David Esquivel, el atacante fue condenado a diez años de prisión en un juicio abreviado en la provincia de San Juan.
Esquivel fue condenado a diez años de prisión dado que a principios de este año intentó asesinar a su ex pareja y sus hijos le salvaran la vida con un juguete, el hecho ocurrió en San Juan, Argentina.
El acontecimiento tuvo lugar el 30 de marzo pasado en el barrio Los Pinos, ubicado en el departamento de Chumbas. Tras una discusión, Esquivel tomó un cuchillo de carnicería para atacar a quien era su pareja en ese momento y le provocó más de diez heridas de gravedad en distintas partes del cuerpo.
Mientras la mujer se defendía de las apuñaladas, el mayor de sus hijos le arrojó un camión de juguete al agresor que impactó en su cabeza. De esa manera, ella pudo aprovechar la distracción por el golpe y logró escapar para pedirle socorro a una vecina, quien junto a otro grupo de personas que viven en las inmediaciones del lugar la ayudaron y la acompañaron a que sea atendida de urgencia en el Hospital Marcial Quiroga.
Tras este hecho, Esquivel fue imputado por el intento de femicidio y quedó bajo prisión preventiva por cuatro meses en el Servicio Penitenciario Provincial, mientras avanzaba la instrucción de la causa. De acuerdo con la acusación del Ministerio Público Fiscal, los fiscales Mario Panetta y la ayudante fiscal Verónica Recio sostuvieron que Esquivel actuó con clara intención de matar a su pareja y que no logró su cometido solo por la intervención del niño y de los vecinos. La mujer sufrió múltiples heridas de gravedad y permaneció internada, aunque logró sobrevivir.
La investigación del caso reveló que se habían cometido diferentes situaciones de violencia de género y de manera reiterada en la vivienda. La víctima convivía desde hacía años con episodios de amenazas y agresiones físicas y verbales, que se intensificaban cuando el agresor consumía alcohol y drogas. Incluso el propio acusado reconoció ante la Policía haber querido matar a su pareja.
Los testimonios de los vecinos, que lo vieron encima de la víctima con el cuchillo, la declaración de médicos y peritos sobre la gravedad de las lesiones, el informe psicológico sobre el menor y la confesión del imputado resultaron determinantes para la acusación. «Quería matarla», confesó Esquivel ante los policías horas después del ataque.
Finalmente, el hombre se enfrentó a un juicio abreviado en los tribunales sanjuaninos y fue condenado a diez años de prisión. De esta manera, Esquivel evitó el desarrollo del juicio oral, por el que se arriesgaba a recibir hasta 13 años de cárcel efectiva.
