El bloque peronista buscó convocar a la última sesión del período ordinario para aprobar la regulación de los DNU y definir las designaciones en la Auditoría General, pero la falta de quórum y las diferencias internas frustraron la estrategia. La resistencia de otros bloques, en pleno debate por el Presupuesto, terminó de bloquear el intento.
El peronismo no logró reunir los 37 senadores necesarios para abrir la sesión que pretendía realizar mañana, con el objetivo de avanzar en la regulación de los Decretos de Necesidad y Urgencia y en la elección de los representantes para la Auditoría General. Según fuentes parlamentarias, estuvieron cerca de conseguirlo, pero otros bloques opositores evitaron acompañar para no tensar su relación con el Gobierno Nacional en medio de las negociaciones del Presupuesto.
La disputa por los lugares en la Auditoría fue uno de los factores que trabó la convocatoria. Los bloques peronistas buscaban asegurar dos cargos, pero con el cierre del período ordinario ya no podrán hacerlo: uno corresponderá ahora a La Libertad Avanza y el otro al radicalismo o a fuerzas provinciales. Además, dentro del propio PJ tampoco había acuerdo sobre los nombres a proponer. Aunque había consenso sobre Javier Fernández, surgieron diferencias respecto de la postulación de Carlos Raúl Gutiérrez Ortiz, mientras que Convicción Federal impulsaba al exsenador Ricardo Guerra.
La UCR también enfrenta internas, ya que el nombre inicialmente impulsado, Luis Naidenoff, perdió consenso y sectores del partido apoyan ahora al chaqueño Víctor Zimerman. En paralelo, el peronismo intentaba dar sanción definitiva al proyecto que limita el uso de los DNU, una iniciativa resistida por el Gobierno Nacional. Sin acuerdo político ni quórum, la última sesión ordinaria del año quedó caída y el oficialismo se consolida con mayor margen en el reparto de cargos de control.
