
Después de la contundente derrota de La Libertad Avanza en suelo bonaerense, el Gobierno Nacional anunció hoy la reincorporación del Ministerio del Interior, relegado a secretaría desde junio de 2024, y designó a Lisandro Catalán al frente de la cartera. La movida refleja un intento desesperado del presidente Javier Milei por recomponer su imagen y recuperar confianza de cara a las elecciones nacionales de octubre.
El anuncio oficial también incluyó la constitución de la llamada “Mesa Federal”, un órgano destinado a articular con los gobernadores un ámbito de diálogo buscando recomponer vínculos rotos tras los conflictos por los cierres de listas provinciales de La Libertad Avanza. Según el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, la mesa se creó “con el objetivo de retomar el diálogo con los gobernadores afines”. Milei, por su parte, simplemente compartió el mensaje en X: “Mesa federal confirmada”.
La medida se produce después de semanas de turbulencias internas, en las que la falta de consenso con los mandatarios provinciales evidenció la debilidad política del presidente libertario. La recuperación del rango ministerial, en teoría, le daría mayor peso a Catalán para negociar con los gobernadores, pero para muchos analistas se trata más de un gesto burocrático que de una solución a los problemas de gobernabilidad del Ejecutivo.
Mientras tanto, Milei sigue rodeándose de su núcleo de confianza —Caputo, Sturzenegger, Bullrich, entre otros— sin señales claras de un plan político que logre equilibrar la centralización del poder y la crisis de credibilidad que su estilo confrontativo ha generado. La “Mesa Federal” parece más un intento de maquillar los resultados de las urnas que una verdadera estrategia de diálogo y coordinación con las provincias.