
La recesión se hizo sentir en las vacaciones de invierno: según CAME, hubo un 10,9% menos de turistas que en 2024. La ocupación hotelera a nivel nacional no alcanzó las expectativas del sector, y La Rioja registró un 51% de ocupación, en línea con la mayoría de los destinos turísticos del país durante la temporada.
La temporada de invierno dejó un sabor agridulce en gran parte del sector turístico en un contexto de profunda recesión económica producto de las medidas del gobierno de Milei. Según CAME 4,3 millones de turistas se movilizaron por el país durante las vacaciones de invierno 2025, una cifra 10,9% en comparación al 2024.
En La Rioja, la ocupación hotelera alcanzó un 51% de acuerdo con la información difundida por Observatorio Económico de Turismo. Además, se generó un impacto económico estimado en más de $10.133 millones para la provincia.
Argentina transita una profunda recesión que impactó de lleno en el sector turístico. Durante las vacaciones de invierno 2025, se movilizaron 4,3 millones de turistas por el país, un 10,9% menos que en el mismo período del año pasado.
El gasto promedio diario por turista fue de $89.000, con una estadía media de 3,9 días. A pesar del movimiento, muchos destinos sintieron el bajón en la actividad, con niveles de ocupación por debajo de lo esperado.
La caída se explica por la pérdida del poder adquisitivo, la pérdida de competitividad cambiaria frente a países limítrofes, y el mal clima —frío o lluvioso— que afectó a varios destinos del país.
- Los más elegidos
Según datos de CAME, pese al derrumbe general del turismo, algunos destinos tradicionales lograron destacarse durante las vacaciones de invierno. Bariloche, Puerto Iguazú, los valles y sierras de Córdoba, Ushuaia, San Martín de los Andes, Villa La Angostura, Mendoza, Salta, El Calafate y los complejos termales de Santiago del Estero y Entre Ríos registraron niveles de ocupación que oscilaron entre el 50% y el 90%.
- La Rioja se consolida como destino turístico
Durante las vacaciones de invierno, La Rioja registró una ocupación hotelera promedio del 51%, con un total de 116.480 pernoctes y una estadía media de 3,5 días, según datos relevados por el Observatorio Económico de Turismo. En total, más de 137 alojamientos fueron monitoreados, lo que permitió estimar un impacto económico superior a los $10.133 millones en toda la provincia.
Los destinos más elegidos fueron Villa Unión (62%), Olta (55%, con picos del 90% durante el Festival del Cabrito), Chilecito y Famatina (50%), Arauco (45%) y la Capital riojana (40%). El 62% de los visitantes llegó desde Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe, mientras que el turismo interno local representó el 7% del total.
El secretario de Turismo, José Rosa, calificó la temporada como “aceptable, pero no buena”, al reconocer una caída del 20% respecto al invierno 2024. Atribuyó esta merma a la falta de políticas nacionales que respalden al sector: “Hoy no contamos con políticas públicas nacionales que nos permitan sostener ni incentivar la actividad (…). El Gobierno Nacional ha decidido abandonar al turismo como política de Estado”. Pese al contexto adverso, destacó que la provincia continúa invirtiendo con recursos propios en promoción, infraestructura y apoyo al sector privado, “porque creemos en el potencial de La Rioja y en su gente”.